Baldosas para exterior

El gres, especialmente el gres porcelánico, es la mejor opción para pavimentos en espacios exteriores. El porcelánico es un material resistente a las heladas, a los golpes y no presenta absorción de agua, por lo que no necesita ser sellado para no mancharse y resistir a las heladas.

Su aspecto se mimetiza con el de otros materiales naturales, como el granito, el barro, el cemento o incluso la piedra natural. Como veremos a continuación su uso es idóneo para lugares como terrazas, balcones, patios y jardínes, pero también para lugares de mucho tránsito como espacios públicos o centros comerciales.

Tipos de baldosas de exterior para terrazas

No todas las baldosas cerámicas son adecuadas para uso exterior, las más porosas son exclusivas para colocación en espacios interiores como baños, suelos residenciales o cocinas. Principalmente podemos encontrar dos tipos que resisten bien a las inclemencias meteorológicas y las condiciones al aire libre: el gres natural y el gres porcelánico. Ambos tipos de pavimento son resistentes a las heladas y a los cambios de temperatura. Además, las puedes encontrar disponibles en una serie de materiales naturales tan variados como la piedra natural, el mármol, el barro o la madera, entre muchas otras finalizaciones.

Gres natural: resistencia y versatilidad en exteriores

El gres natural es un tipo de baldosa cerámica especialmente diseñada para soportar las condiciones climáticas adversas y las exigencias del uso en exteriores. Su composición y proceso de fabricación le confieren una gran resistencia a las heladas, los cambios de temperatura y la humedad. Además, el gres natural es antideslizante, lo que lo convierte en una opción segura para terrazas y áreas de paso. En cuanto a su versatilidad, este material se encuentra disponible en una amplia gama de colores, texturas y acabados, lo que permite adaptarse a diferentes estilos y ambientes exteriores. En nuestras tiendas podrás encontrar las principales firmas de gres natural, Gres de Breda, Brancós o Grecogres entre muchas otras.

Gres porcelánico: durabilidad y diseño para terrazas

El gres porcelánico es otro tipo de baldosa cerámica ideal para su uso en exteriores, ya que cuenta con características técnicas similares a las del gres natural. Su baja absorción de agua, alta resistencia a las manchas y al desgaste, así como su capacidad para soportar heladas y cambios de temperatura, lo convierten en una opción duradera y de fácil mantenimiento. Además, el gres porcelánico ofrece una gran variedad de diseños, imitando con gran fidelidad materiales naturales como la piedra, el mármol o la madera, lo que lo convierte en una opción estéticamente atractiva para terrazas y espacios al aire libre.

Variedad de materiales y acabados para espacios al aire libre

Al elegir baldosas para exteriores, es importante tener en cuenta la variedad de materiales y acabados disponibles para lograr el aspecto deseado en la terraza o espacio exterior. Algunas opciones incluyen:

Piedra natural: Con su belleza y textura única, la piedra natural es una opción clásica y elegante para terrazas. Puedes optar por baldosas que imitan piedras naturales tan nobles como el granito, la pizarra o el cuarzo, cada una de ellas con sus propias características y ventajas estéticas.
Mármol: El mármol es una opción sofisticada y lujosa para exteriores, especialmente cuando se busca un aspecto refinado y exclusivo. Sin embargo, requiere un mayor cuidado y mantenimiento que otros materiales. Por eso apostar por baldosas para exterior de tipo mármol es una opción ideal para renovar el aspecto de tu jardin o terraza.
Barro: Las baldosas de barro, como las tradicionales tejas de terracota, aportan un encanto rústico y cálido a las áreas exteriores. Son duraderas, pero requieren un tratamiento adecuado para protegerlas de las manchas y la humedad. Apostar por baldosas porcelánico de aspecto terractora es una opción ideal para disfrutar de este material cálido sin renunciar a las ventajas de la cerámica.
Madera: No hay ninguna duda de que la madera es un material natural y acogedor que aporta calidez a los espacios al aire libre. Sin embargo, es importante optar por maderas resistentes a la intemperie, como la teca o el ipe, o por baldosas cerámicas que imitan la madera, ofreciendo una estética similar con menos mantenimiento.

Medidas baldosas para exterior

Hay una amplia variedad de medidas para suelos de exterior, aunque por aspectos técnicos la medida más habitual que se suele utilizar son piezas de formato pequeño o, por lo menos, no demasiado grandes. Las baldosas de formato pequeño pueden adaptarse fácilmente a las pendientes de cubiertas y patios de cuatro aguas, mientras que las baldosas grandes o de gran formato son sencillas de colocar en espacio con una sola pendiente.

Otra solución para baldosas para exterior es la colocación modular. Este tipo de baldosas está disponible en múltiples formatos para combinarse entre sí y ofrecer diseños geométricos originales.

Suelos antideslizantes

El antideslizamiento es uno de los principales factores a tener en cuenta para elegir un suelo de exterior, si no el factor más destacado. Los suelos para exterior deben cumplir con estrictas normas de antideslizamiento para evitar caídas y resbalamientos en espacios exteriores como terrazas, balcones o jardínes. Para ello debes asegurarte de elegir un suelo que cumpla con el grado adecuado de la normativa R o Clase, es decir una baldosa para exterior deberá ser como mínimo R10 (DIN 51130) o Clase 3 (UNE ENV 12633).

Otro aspecto a tener en cuenta es la facilidad de limpieza de la superficie. De poco vale que un suelo sea muy antideslizante pero que limpiarlo sea una tarea prácticamente imposible. Para ello contamos con suelos porcelánicos para exterior con Clase 3 cuya textura es extremadamente suave y fácil de limpiar. Estos mismos suelos pueden utilizarse en espacios interiores y exteriores.

Suelos de exterior porcelánicos

Los espacios de exterior están expuestos a los rayos solares, las inclemencias meteorológicas y al agua. Por lo tanto están sometidas a constantes cambios de temperatura y permanentemente en condiciones húmedas. Para que un suelo de exterior sea resistente al paso del tiempo debe cumplir con una serie de requisitos imprescindibles. Debe tener una baja absorción de agua, su color no se debe alterar con los rayos solares y no debe mancharse. El suelo porcelánico cumple todos esos requisitos y además soporta los cambios drásticos de temperatura, el frío, el calor y el hielo.

Cómo limpiar baldosas de exterior

El gres porcelánico no tiene porosidad, pero sí su textura es abrasiva la suciedad se puede depositar en la capa superficial dificultando la tarea de limpieza. Sin embargo, si la superficie es suave, será más fácil eliminar la suciedad de la capa superficial de la baldosa. Por ello es muy importante elegir el acabado antideslizante adecuado. En cualquier caso, la cerámica porcelánica se deberá limpiar con agua y jabón neutra y, en los casos con más rugosidad en la superficie, eventualmente con la ayuda de una hidrolimpiadora de agua a presión.