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La piedra solnhofen es una piedra caliza de origen alemán con una superficie agradable, resistente y que evita resbalamientos. De color amarillo y acabado mate, su formato irregular y grosor variable hacen de esta piedra una opción perfecta para pavimentos y revestimientos tanto en interiores como exteriores. La piedra solnhofen, que tiene incrustaciones de fósiles, se vende por metro cuadrado y se presenta en palets. Este material de alta resistencia y durabilidad es ideal para formar pasos japoneses en jardines y áreas de alto tránsito, destacándose por su muy ligera destonificación.